El presidente Enrique Peña Nieto, durante la celebración del 30 aniversario del Primer Cuerpo del Ejército. Lo acompañan el jefe de Gobierno capitalino, Miguel Ángel Mancera, y los titulares de Sedena y Semar, Salvador Cienfuegos y Vidal Francisco Soberón, respectivamente Alonso Urrutia

Durante la celebración del 30 aniversario de la conformación del Primer Cuerpo del Ejército, el presidente Enrique Peña Nieto sostuvo que la reacción de la sociedad y de las instituciones –especialmente de las fuerzas armadas– ante las afectaciones de los sismos ‘‘ha estrechado la cercanía entre los mexicanos y nuestros soldados, pilotos y marinos’’. En ese contexto, el mandatario pidió a los militares seguir mostrando ‘‘el lado humano de la institución’’.

La efeméride fue utilizada por el Presidente, en el Campo Militar Número 1-A, para reivindicar el papel de las fuerzas armadas y de la sociedad al mismo tiempo. Subrayó que los sismos de septiembre de 2017 dejaron claro tres cosas: ‘‘La primera es nuestra vulnerabilidad ante la fuerza destructiva de la naturaleza; la segunda, la unidad y solidaridad del pueblo de México, particularmente de sus jóvenes, y la tercera, la fortaleza de nuestras instituciones’’.

Acompañado por los secretarios de la Defensa Nacional, Salvador Cienfuegos, y de Marina, Vidal Francisco Soberón, así como del jefe de Gobierno capitalino, Miguel Ángel Mancera Espinosa, Peña Nieto fue obsequioso en su reconocimiento a los militares. ‘‘Hoy les digo que al igual que sus altos mandos me siento muy orgulloso del desempeño de todos y cada uno de ustedes. Estoy muy satisfecho con su invaluable labor en estas emergencias, así como en todas las misiones que les han sido encomendadas’’.

En su oportunidad, el general de división, diplomado de Estado Mayor, Raúl David Guillén Altúzar, sostuvo que ante las circunstancias que exigen la presencia de las fuerzas armadas hay el compromiso para actuar en consecuencia. ‘‘No buscamos hacer tareas que no nos corresponden, pero de ninguna manera dejaremos de hacer lo que nos dicte la Carta Magna, lo que usted nos instruya como comandante supremo y lo que la sociedad nos demande. Lo haremos sin escatimar esfuerzos, sin distingos y, sobre todo, sin protagonismos’’.

Peña Nieto señaló que la participación de las fuerzas armadas en la atención de las contingencias forman parte importante de su historia, pero en específico la presencia militar frente a los sismos de septiembre forma una página especial. Describió que la presencia militar dio ‘‘tranquilidad a comunidades enteras y fue motivo de consuelo y esperanza para la población damnificada’’. Para el Presidente, en esta coyuntura ‘‘ciudadanía e instituciones son los dos brazos que están permitiendo a México ponerse de pie’’.

El Primer Cuerpo del Ejército es una unidad de reserva estratégica creada en 1987, ‘‘que permite responder a cualquier eventualidad que perturbe la paz, la tranquilidad y el orden interno del país’’.

Aunque tiene diversas funciones en materia de seguridad, cuando se aplica el Plan DN-III es una instancia que ‘‘organiza y articula la fuerza de apoyo para casos de desastre, con el fin de reforzar a los mandos que podrían ser rebasados en sus capacidades de auxilio’’

En su momento, Peña Nieto subrayó la importancia de este cuerpo para la atención de contingencias, porque ‘‘es la fuerza de tarea de emergencia Valle de México, organismo flexible y móvil que se mantiene en situación de alerta permanente para aplicar de forma inmediata el Plan DN-III en toda la República’’.

Finalmente señaló que en la etapa de la reconstrucción nuevamente se exigirá al personal militar mostrar ‘‘su más alta vocación de servicio’’.