Enrique Méndez

Una alianza aritmética con el PAN no es la solución para la crisis del PRD, derivada de la salida de sus fundadores y líderes, porque los militantes perredistas votarían por Morena en 2018, afirmó ayer el gobernador de Michoacán, Silvano Aureoles Conejo.

Durante la última sesión de trabajos de la corriente en la que participa, Foro Nuevo Sol (amalios), anunció que después de su segundo informe de gobierno, en septiembre, hará recorridos por el país para buscar la candidatura del frente amplio opositor anunciado por esos dos partidos.

‘‘Pero no seré el Juanito (Zepeda), sólo para quitarle votos a Morena, como en el estado de México’’, afirmó.

Aureoles cuestionó que desde fuera del partido se manipularan los tiempos para mantener a Alejandra Barrales en la dirigencia nacional del Partido de la Revolución Democrática, e incluso la forma en que se manejó el caso del operativo de la Marina en Tláhuac.

Abundó: ‘‘Si eso ocurre en cualquier estado, es delincuencia organizada, pero si es en la Ciudad de México, son pandilleros’’.Para él, la elección de 2018 es la oportunidad para el PRD de convertirse ‘‘en un verdadero partido político’’ y superar el hecho de que ‘‘su vida sea sólo un movimiento social en contra de todo. No puede ser eternamente oposición’’.

Afirmó que no cree en los equilibrios internos del partido y lamentó que la ‘‘mayoría artificial’’ para mantener a Barrales no ayuda. Reprochó que para evitar un cambio en la presidencia primero se argumentó que no había recursos, y cuando esto se solucionó ‘‘entonces vino dejar pasar el tiempo. ‘‘Lo mejor habría sido la renovación de los dirigentes, pero a estas alturas no puede ser, por razones ampliamente conocidas’’, agregó.

Según Aureoles, un frente opositor en 2018 no debe integrar sólo a PAN y PRD, pero además debe definirse quién tiene el perfil para encabezar un gobierno derivado de esa alianza.

Afirmó que el candidato debe ser ‘‘alguien que no ande en el protagonismo personal. ¡Estoy listo! Voy a participar, pero primero la propuesta, porque si no, empiezan los piquetes de ojos y patadas en las espinillas. O el ‘yo soy el más chinguetas, el que asa la carne en el agua’’’.