Roberto Garduño y Enrique Méndez

Al cierre de la sesión de ayer, cuando sólo había un centenar de legisladores en el salón, el pleno de la Cámara de Diputados aprobó y envió un exhorto a las secretarías de Hacienda y de Relaciones Exteriores (SRE) para proteger las remesas y evitar que, como ha amenazado Donald Trump, sean sujetas de algún gravamen por el gobierno de Estados Unidos.

Durante la presentación del exhorto, la diputada Araceli Saucedo (PRD) señaló que, de acuerdo con datos del Banco de México (BdeM), en 2016 los mexicanos que trabajan en Estados Unidos enviaron al país casi 27 mil millones de dólares, un máximo histórico, incluso superior a las exportaciones petroleras.

Las remesas son cada vez más vitales, incluso más altas que los ingresos por turismo e inversión extranjera. La realidad es que el país depende en gran medida de los trabajadores que viven en el exterior, afirmó.

La diputada Gissel García (PES) refirió que familias de estados como Zacatecas, Guanajuato y Michoacán tienen en las remesas su principal fuente de ingresos e incluso los recursos de entidades como Guerrero y Oaxaca dependen hasta 10 por ciento del envío de esos fondos.

La amenaza latente de Trump, de gravar ese dinero para pagar su muro en la frontera, nos lleva a votar este exhorto, dijo.

El diputado Juan Romero Tenorio (Morena) propuso que, una vez hecha la conversión a pesos, el BdeM y Hacienda retiren los dólares de la circulación y los utilicen para constituir un fondo para financiar infraestructura en gran escala en las comunidades expulsoras de migrantes.

Sostuvo que la información difundida sobre las presiones de Trump a México obliga a tomar decisiones urgentes, y que dicho fondo podría reactivar las zonas económicas con mayor migración.

El Ejecutivo puede adoptar nuevas políticas que realmente hagan peso a los discursos de unidad que no toman acciones de firmeza en la defensa de los migrantes, dijo. La diputada Saucedo rechazó esa adición, con el argumento de que sólo retrasaría las medidas en favor de los migrantes.