Israel Dávila

La operadora OHL-México, también administradora de las autopistas Circuito Exterior Mexiquense y Viaducto Elevado Bicentenario, que recorren gran parte de los municipios mexiquenses ubicados en el valle de México, informó este lunes que a partir de hoy aplicará las tarifas máximas en los peajes de ambas vialidades.

En un comunicado, OHL México informó que el incremento es de acuerdo con lo estipulado en los títulos de concesión que se otorgaron a la empresa hace más de siete años cuando se les encomendó construir, operar y administrar estas vialidades.

Los incrementos, de alrededor de 4 por ciento en las tarifas, implicarán que el costo por recorrer los más de 131 kilómetros de longitud que tiene el Circuito Exterior Méxiquense sea de 300 pesos, mientras los 23 kilómetros del Viaducto Bicentenario costarán 74 pesos.

Segunda alza en ocho meses

Este es el segundo incremento que OHL México aplica al peaje de estas autopistas en lo que va del año. El primer aumento lo efectuó en la primera quincena de febrero, con autorización del Sistema de Autopistas, Aeropuertos y Servicios Conexos del Estado de México (Saascaem). Ahora lo aplican con base en el título de concesión.

El mes pasado OHL se había quejado de que el Sistema de Autopistas Aeropuertos y Servicios Conexos del Estado de México no le había otorgado aval para realizar los ajustes en los peajes de ambas vialidades.

Al cuestionar a la Secretaría de Infraestructura del gobierno mexiquense –de la que depende el Saascaem– si había autoriza- do el aumento, la dependencia respondió que la concesionaria está haciendo uso de su derecho a aplicar tarifas de acuerdo con el título de la concesión.

Sanciones en 2016

El año pasado el gobierno del estado de México sancionó a OHL tras encontrar inconsistencias en el manejo de la concesión.

En aquella ocasión, la Secretaría de la Contraloría del Esta- do informó que se impuso una multa de 38 millones de pesos a OHL derivado de las irregula- ridades por 296 millones de pesos, que encontró la consulto- ra Pricewaterhouse Cooper’s, en los procesos de construcción, manejo y operación del Viaducto Elevado Bicentenario.

Las inconsistencias se refe-rían a cambios en el proyecto ejecutivo de la obra sin autorización, lo que implicó elevación de costos por 37 millones de pesos, discrepancias en el sistema de peaje, por 197 millones, y diferencias por ajustes de costos, por 62 millones, para dar un total de 296 millones de pesos que no se justificaron.