Ángeles Cruz Martínez
Tras fortalecer su microbiota, ninguno de los participantes en el estudio requirió ser hospitalizado
El estudió concluyó que aunque no son una cura al covid-19, las sustancias investigadas se convierten en un coadyuvante para el control de la enfermedad.
Por primera vez una investigación en la que participaron 300 mexicanos con covid-19, pacientes de tratamiento ambulatorio del Hospital General Manuel Gea González, demostró la eficacia de cuatro cepas de probióticos para reducir la duración de los síntomas de la infección y, por lo tanto, la necesidad de consumir medicamentos como el paracetamol para el control de malestares del tipo de la fiebre y el dolor.
Luego de un mes, el estudio comprobó en la mitad de las personas la eliminación del coronavirus, contra 28 por ciento de quienes no utilizaron el producto.
Ana Teresa Abreu, especialista en neurogastroenterología, aseguró que fortalecer la microbiota (antes conocida como flora intestinal) con las cepas de los probióticos utilizados en la investigación estimula el sistema de defensas contra infecciones respiratorias.
En la presentación de los resultados del estudio clínico ayer, Pedro Gutiérrez Castrellón, del Centro de Investigación Traslacional en Ciencias de la Salud del Hospital Gea González, explicó que la microbiota está en todo el organismo: la piel, los ojos, los oídos, las vías respiratorias, el intestino, las vías urinarias y en las vías urogenitales. Se compone por un trillón de microorganismos entre bacterias, virus, hongos y parásitos que protegen y ayudan a mantener un estado de salud en equilibrio.
Ningún internado
La investigación se realizó durante 2021. La edad media de los participantes fue de 37 años, 42 por ciento tenían alguna enfermedad considerada de riesgo para desarrollar complicaciones graves por covid-19 (diabetes, hipertensión, obesidad). Pero ninguno de ellos fue hospitalizado; por el contrario, recuperaron su salud.
Ana Teresa Abreu, integrante de la Sociedad Mexicana, Latinoamericana y Americana de Neurogastroenterología, explicó que el protocolo del estudio surgió del conocimiento previo del mecanismo de acción de las cepas elegidas, las cuales actúan en el eje intestino-pulmón.
La investigación empleó cepas de origen bacteriano: Lactobacillus plantarum KABP 022, 023, 033 y un Pediococcus acidilactici KABP 021. Fortalecen el epitelio intestinal –que separa el medio interno del externo en el organismo–, reducen la inflamación y la permeabilidad intestinal y producen sustancias que estimulan al sistema de defensas.
Coadyuvantes
La especialista recordó que la infección por el virus SARS-CoV-2 genera un proceso inflamatorio en muchas ocasiones descontrolado, pero que resultó de menor magnitud con el uso de los probióticos en la investigación.
Los probióticos se convierten de esa forma en un coadyuvante para el control del covid-19.
Abreu añadió que, igual que en 80 por ciento de las infecciones causadas por virus, no es necesario el uso de antibióticos en el covid-19, pero una formulación como la descrita favorece la recuperación de los enfermos.
Pedro Gutiérrez Castrellón insistió en que la microbiota intestinal ayuda a mantener una salud integral. Mejora las defensas del organismo, ayuda al proceso de desinflamación de las vías respiratorias y controla los síntomas de padecimientos digestivos.