José María Carmona
Los fenómenos económicos y financieros contemporáneos necesitan interpretaciones y explicaciones con un rigor analítico y sistemático, esto requiere de la profesión de los economistas y sobre todo de su formación académica y profesional un conocimiento de todas las teorías económicas; cabe señalar que en ciencias sociales la interpretación y explicación de un fenómeno por ejemplo la inflación, las relaciones económicas internacionales, el crecimiento económico, las tasas de desempleo, el comportamiento de las tendencias económicas y financieras son interpretadas por diversas teorías económicas.
Por lo tanto, si no, el economista tiene el conocimiento y dominio de las diferencias teorías económicas no puede desempeñar su trabajo profesional.
De esta forma, la docencia económica en la formación profesional de los economistas es importante, desafortunadamente en la mayoría de las escuelas y facultades no solo del país-México- sino al nivel internacional a dominado una sola corriente de pensamiento económica: la escuela neoclásica o austriaca y su versión más reciente el monetarismo como fundamento de la política económica actual de todos los gobiernos y todas las tendencias.
Lo anterior, es natural, en los principales centros de estudios de las universidades anglosajonas han dominado desde 1870 dos escuelas, la neoclásica-austriaca y la keynesiana.
Alrededor de estas dos teorías antagónicas, los gobiernos han hecho política económica.
Como se sabe la escuela neoclásica- austriaca fue una respuesta contra el marxismo en particular contra la publicación del Tomo I del Capital de Karl Marx y su teoría del valor trabajo.
En los círculos académicos y escuelas y facultades de economía, la escuela neoclásica es enseñada mediante manuales de muy bajo valor académico y teórico, nunca se estudia en las obras originales. Y es conocida como la teoría marginal del consumidor y del productor, así como la formación del mercado de competencia perfecta.
El ataque a la teoría valor trabajo de Marx fue directo a que en el ámbito de la producción se determina por medio de la cantidad de trabajo socialmente necesario el valor de la mercancía, además de que la economía se considera como una relación social de producción entre los individuos y no entre las cosas y tiene un carácter histórico que significa que las leyes económicas son históricas, válidas para un periodo de tiempo y no para siempre como posteriormente lo afirma la teoría neoclásica, además que la misma no toma en cuenta los problemas políticos, sociales en el ámbito económico.
En otro orden de ideas, las teorías económicas representan los intereses de clase en diversas épocas históricas así, Adam Smith representó los intereses de la burguesía manufacturera, David Ricardo a los intereses de la burguesía naciente industrial, por su parte Karl Marx a los intereses del proletariado o clase obrera y finalmente la escuela neoclásica austriaca es la expresión de los intereses de la burguesía financiera de finales del siglo XIX.
Pero volvamos a la propuesta inicial de este trabajo es la controversia entre la escuela neoclásica austriaca y su última versión monetarista y la keynesiana; la primera se fundamenta en que el mercado regula el comportamiento de los agentes económicos y que el mismo tiende al equilibrio, además que las perturbaciones son momentáneas y la intervención del estado son para corregir las mismas y de esta manera el mercado vuelva a tender al equilibrio en el ciclo económico, por ejemplo.
En cambio, la corriente keynesiana, afirma que el estado debe de intervenir para restablecer mediante el gasto público la “normalidad” en los desequilibrios económicos impulsando la demanda efectiva para tender al pleno empleo de todos los factores productivos incluyendo el pleno empleo.
Mientras que la escuela neoclásica está en contra de la intervención del estado en la economía y que el mercado se autorregula, mientras la corriente keynesiana está por la intervención directa del estado en la economía para regular el ciclo económico mediante la política fiscal y monetaria.
Se pueden agregar muchas cosas más, pero las ideas anteriores son de manera esquemáticas; solo hay que señalar que el pensamiento keynesiano dominó el ámbito académico y la política económica durante cuarenta años y a partir de los años setentas, la teoría neoclásica monetarista a ocupado el papel dominante en las facultades de economía y en los gobiernos con sus efectos sociales negativos como se sabe.
La controversia entre ambas corrientes del pensamiento económico se puede sintetizar en que la escuela neoclásica pugna por el libre mercado y una intervención regulatoria del estado, mientras que la corriente keynesiana pugna como ya se mencionó por una intervención activa del estado en el proceso económico a través de la política fiscal y monetaria.
Es por ello, que en la Facultad de Economía “Vasco de Quiroga” ante la inminente reforma a su plan de estudios la vigencia de la enseñanza de todas las corrientes del pensamiento económico es fundamental y no se debe de permitir la mutilación del plan reduciéndolo a un solo pensamiento económico particularmente el neoclásico monetarista eso constituye una verdadera CONTRARREVOLUCIÓN en una universidad pública como la Michoacana.