Todo este proceso de reforma de las jubilaciones en la UMSNH ha sido una mera simulación del rector Cárdenas Navarro. Nunca tuvo interés de consensuar un proyecto de reforma con los sindicatos universitarios. Simula con la dirigencia del SPUM un dialogo sin agenda, ni tiempos y en la alcoba. Esto explica el resultado de sus “gestiones” ante la Federación. No obtuvo recursos extraordinarios sino un ultimátum para los sindicatos: o aceptan la reforma a las jubilaciones o se mueren de hambre porque no se pagarán salarios, ni aguinaldo.

Veamos la crónica del último tramo de esta opereta. En cada reunión con funcionarios de la SEP, el rector envió comunicados a la prensa mercenaria con un doble lenguaje, en los que explícitamente planteaba la existencia de posibilidades para conseguir recursos con la federación, pero inmediatamente después mostraba los oficios de respuesta donde le condicionan a la UMSNH el apoyo financiero a una reforma al sistema de jubilaciones. En el mismo comunicado, el doble mensaje; primero de esperanza y luego de cancelación de expectativas.

En La reunión del rector y el gobernador Silvano Aureoles Conejo, con el Secretario de Educación Pública, el 21 de noviembre del presente se publicitaron solo las expectativas positivas, pues fue calificada como histórica; quedando todo mundo perplejo, porque nunca nadie explicó las razones por las cuales tal evento va a quedar perenne en la memoria de los nicolaitas. La segunda parte del mensaje, era el ultimátum a los sindicatos, pero se lo guardaron unos días.

A fines de la semana pasada la campaña de medios cambió de tono. Se fue dejando a un lado el discurso esperanzador para hablar solamente de la cruda realidad: “Sí habrá recursos extra en la UMSNH… pero están condicionados”.  Esta fase la campaña de medios cumplió con la función de tratar de manipular emocionalmente a los trabajadores universitarios, generando expectativa de solución, para luego no cumplirlas e intentar quebrar la resistencia de los trabajadores.

Finalmente, el rector se quitó la careta de dialogo y conciliación, para asumir la de la confrontación abierta. Ya no habla de consensuar una propuesta de reforma al sistema de jubilaciones, ahora exige sea aceptada a la brevedad, de lo contrario los 550 millones de pesos que ofrece la Federación no serán liberados para que la UMSNH pueda pagar los salarios y las prestaciones de fin de año.

Además, el rector Cárdenas Navarro quita el seguro a la pistola con que nos encañona e introduce un condicionamiento adicional, desconocido por la opinión pública universitaria. Argumenta que la Auditoria Superior de la Federación (ASF) y la Auditoria Superior de Michoacán han emitido la siguiente recomendación: los salarios, aguinaldos, primas vacacionales y demás prestaciones de ley del ejercicio 2019 no podrán pagarse con recursos del 2020. Ojalá, el rector fuera también solicito para aclarar las observaciones que la ASF le tiene a la UMSNH por 1,095 millones de pesos, en 13 auditorías realizadas del 2005 al 2016. Si aun así los trabajadores no ceden, las autoridades inventarán otra argucia con el propósito de reformar por la fuerza el sistema de pensiones universitario.

Ahora viene la mayor presión y la definitiva. El rector anuncia que interrumpirá el pago de salarios y aguinaldos por un periodo indeterminado, aquel en el que los trabajadores sean capaces de resistir sin cobrar. Al mismo tiempo, los esquiroles entraran en acción y jugarán su acostumbrado papel.

LA DIRIGENCIA DEL SPUM, ESQUIROL EN FUNCIONES

El SPUM está lejos de ser el sindicato que fue durante más de cuatro décadas. Con altibajos, el sindicato de profesores fue un instrumento de lucha y defensa de los derechos laborales de sus agremiados, logrando plasmar en su Contrato Colectivo de Trabajo importantes conquistas laborales, a pesar de los embates de los gobiernos neoliberales.

Durante más de tres décadas, los trabajadores enfrentamos la política de topes salariales, inaugurada por el Presidente de Lamadrid (1982-1988), lo que significó incrementos salariales menores a la inflación anual; con la consecuente pérdida del poder adquisitivo. Ante esta situación, los sindicatos universitarios trataron de evitar una mayor reducción salarial de sus agremiados, por la vía de obtener mayores prestaciones y que los gobernantes neoliberales han querido cercenar desde varios años porque les parecen excesivas. Quisieran tener a los trabajadores nicolaitas con sueldos infames y jubilaciones precarias, como ocurre con la gran mayoría de los trabajadores mexicanos. Pero nosotros pudimos defendernos; éramos miembros de un gremio académico con relativa independencia, el SPUM, que utilizamos como instrumento de lucha.

De consumarse la reforma al sistema de jubilaciones en los términos impuestos por el rector Cárdenas Navarro, no solo se afectará el régimen de jubilaciones de las generaciones actuales y futuras, sino también impactará negativamente en el monto de los salarios de los trabajadores universitarios, lo cual no ha sido siquiera estimado en su magnitud por el propio gremio. Es una gran irresponsabilidad de la dirigencia del SPUM, que más bien se empeña en jugar el papel de esquirol, propiciando una pasividad sindical nunca antes vivida y ahora se exhibe como palero del rector.

El 03 de diciembre pasado, la rectoría de la UMSNH emitió un comunicado en el que señala que se reunió con el Comité Ejecutivo General del SPUM, quien planteo modificaciones al anteproyecto de reforma al régimen de jubilaciones presentado por la rectoría, por lo que se elaborará “una nueva versión de actualización al sistema de jubilaciones y pensiones”…al que se incorporen “algunas de las propuestas del SPUM, tomando en consideración ciertas variables para los profesores en activo con menos de 25 años de servicios”. Así, la rectoría y la dirigencia del SPUM simulan negociar un proyecto de reforma que ya existe y que impondrán a las bases, carentes de información. Con ello, el Comité Ejecutivo General le hace el juego al rector y cumple a la perfección, el papel de palero de la autoridad. Es inaplazable exigir al CEG del SPUM explique sobre qué bases propuso modificaciones al proyecto de reforma de la autoridad.

El golpe que se cierne sobre los sindicatos universitarios nicolaitas no terminará con la reforma a las jubilaciones. Para el 2020 se vislumbra un segundo convenio, solo negociado entre el rector y gobernador con la SEP, en donde se imponen nuevos sacrificios a los trabajadores. Es muy probable vayan sobre el resto de las prestaciones, que la SEP considera excesivas y no reconocidas.

Idéntica situación se vive en la Universidad Autónoma de Nayarit. Aquí el gobierno federal está condicionado la entrega de recursos extraordinarios a cambio de que los sindicatos de académicos y de administrativos acepten que sus prestaciones sean cercenadas en los respectivos CCT. Quienes desfalcaron directamente a la Universidad Autónoma de Nayarit están libres, pero la burocracia universitaria quiere que los trabajadores universitarios paguen los platos rotos. Igual que aquí.

Debemos de mantener la lucha para terminar con dirigentes charros y con los grupos universitarios caciquiles que utilizan los recursos universitarios de manera patrimonialista. No sabemos aún, si estamos en el epilogo de una etapa de lucha ó en el prólogo de la siguiente. No importa. La historia se escribe a contrapelo, con la resistencia diaria de hombres y mujeres que no se venden.

 

CONSEJO EDITORIAL.  Daniel Val Arreola, Fernando Rendón García y J. Jesús Conejo Nava.