José María Carmona

La emergencia sanitaria ya llego, es decir la segunda etapa de la propagación del Covid 19 y el gobierno de López Obrador  apenas anuncio las medidas sanitarias para evitar al máximo posible el número de infectados sino de fallecimientos principalmente en la población de la tercera edad.

Se pude hacer un conjunto de análisis sobre la evolución de la pandemia en el país y los efectos negativos en el ámbito social, económico y financiero en un país donde la mitad de la población vive en la pobreza; pero en este momento tan difícil para el mundo y para el país resulta innecesario ya que los gobiernos de todo el mundo incluyendo el de la 4T se derrumban al igual que los mercados financieros.

Es por ello que no basta con las medidas anunciadas este martes 24 de marzo por López Obrador, a pesar de que la conducción está en manos  de la autoridad de salud pública, esto es insuficiente para la magnitud y la emergencia sanitaria y lo que se espera, que es el escenario más grave de acuerdo a la proyección matemática.

Por su parte los gobiernos estatales toman las medidas necesarias para reducir los efectos negativos de la pandemia entre la población, pero como dice el dicho “cada loco con su tema”, sin una coordinación al nivel nacional, donde la población principalmente pobre será la más afectada, a esto hay que agregar el desprestigio de la clase política y las creencias religiosas, sociales y culturales de los ciudadanos, que por cierto López Obrador a abonado a que en el país no pasa nada.

Hugo López Gatel, quien conduce la estrategia para reducir al  máximo los efectos nocivos sobre la pandemia a tenido criticas muy fuertes, a pesar de que técnicamente la situación de crisis la ha manejado  favorablemente, pero esta no es la discusión de la política pública sobre la emergencia sanitaria, sino el gobierno de la 4T todavía no entiende o no sabe esta situación que es un asunto de Estado, y cuando se dice esto significa que todos los recursos humanos, económicos, financieros e institucionales del mismo Estado y sus poderes deben de estar alineados para alcanzar el objetivo que es reducir al máximo los efectos nocivos de la pandemia del Coronavirus.

Pero este es el caso de todos los gobiernos, principalmente de España, Italia, Alemania y ahora el Reino Unido donde la política o la estrategia asumida no fueron de Estado y ahí se tiene las consecuencias sobre  toda la población y qué decir de los Estados Unidos con Trump.

El que escribe es enemigo de las medidas totalitarias pero para este caso inédito en la historia contemporánea del país y de acuerdo a las proyecciones de las autoridades de salud es necesario pensar en adoptar medidas más drásticas  sobre la población aunque la consecuencia económica sobre los sectores que sobreviven al día sean mayores.

Por otra parte los que sobre vivan a la pandemia tendrán la posibilidad de plantear una reconversión no solo del sistema político económico y social sino del futuro del país. En esta crisis todos pierden pero está claro que los que más perderán son los que viven de un salario o de la economía informal que es el 50 por ciento de la población económicamente activa, mientras que los inversionistas recuperaran sus ganancias a costa del Estado y del hambre y miseria de los trabajadores y los pobres.

Es por ello en primer término como ya se dijo se debe de  exigir a los poderes del estado que asuman una sola estrategia en primer término y después la vida política y social debe de sufrir una verdadera transformación que no es la de la 4T, donde principalmente los trabajadores y el pueblo participe activamente en la reconstrucción nacional y no en beneficio de los actuales dueños del país, porque este asunto de la emergencia sanitaria y lo que venga después es un asunto de Estado.