chemaJosé María Carmona

Después de la movilización de la comunidad nicolaita para evitar el albazo por parte del Congreso del Estado de Michoacán, para imponer unilateralmente una reforma al sistema de jubilaciones y pensiones, una reingeniería administrativa y la reglamentación de las casas de estudiante, el Rector Medardo Serna González como presidente del H. Consejo Universitario y los dirigentes del SPUM y SUEUM encabezaron la movilización para evitar que los diputados aprobaran la reforma constitucional con los artículos transitorios al artículo 143 de la Constitución del Estado de Michoacán, sin embargo los diputados no atendieron el llamado de la comunidad nicolaita y aprobaron la reforma donde la asignación del presupuesto a la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo quedo condicionado a la matricula y con ello se da un paso atrás en la gratuidad de la educación media superior y superior en Michoacán.

El golpe fue evitado, hasta cierto punto, pero con la reforma referida en los términos aprobados los diputados violentan la autonomía universitaria.

A pesar de ello en una acción de unidad no vista desde los tiempos en que los universitarios nicolaitas se movilizaron en contra de la nefasta Junta de Gobierno a mediados de los años setenta del siglo pasado, fijaron su posición ante el Congreso Local de defensa de la universidad pública.

Como lo dijo el Rector Serna González fue una victoria de toda la comunidad nicolaita; ahora el H. Consejo Universitario en su sesión del pasado día 14 mayo convoca a la comunidad nicolaita a retomar los trabajos para iniciar la verdadera reforma integral de la Universidad Michoacana mediante mecanismos democráticos donde prive el dialogo y el consenso. Al mismo tiempo el máximo órgano de gobierno aprobó la Comisión por la defensa de la Casa de Hidalgo; además de trabajar en la construcción de una agenda, donde participaran las autoridades universitarias, los representantes del SPUM y del SUEUM, así como los estudiantes.

La conformación de la Comisión de defensa de la universidad y la construcción de la agenda, no solamente debe ser apoyada por todos los sectores universitarios, sino también se deben de impulsar la participación de todos los nicolaitas mediante mecanismos abiertos, representativos y democráticos.

Nadie niega la crisis financiera estructural de la universidad, pero la misma es producto de los recortes al presupuesto universitario, por parte de los gobiernos y los legisladores federales y locales; mientras en plena campaña electoral los futuros legisladores tanto federales como locales y los gobernantes derrochan 30 mil millones de pesos y en particular los partidos gastaran la mitad en sus impresentables campañas electorales, en tanto se niega el incremento al presupuesto a la Casa de Hidalgo

Pero también la universidad nicolaita tendrá que fortalecer los mecanismos de transparencia que eviten la opacidad, la posible corrupción y que el presupuesto universitario sea ejercido con transparencia.

Este año se elegirá nuevo H. Consejo Universitario, y en el mes de enero nuevo Rector, esta vez es de esperarse que se puedan construir las condiciones para que la comunidad nicolaita participe directamente en la elección del mismo de manera democrática.

Lo anterior implica la reforma a la Ley Orgánica – en la cual se está trabajando - para que ya no sea la Comisión de Rectoría la que designe al nuevo rector a espaldas de la comunidad universitaria, tal vez es una tarea difícil pero no imposible, mas aun cuando el H. Consejo Universitario en su última reunión manifestó que existe voluntad política; ya se demostró que con la unidad se puede conseguir la defensa de la universidad.

Es la hora de democratizar a la universidad en todos sus aspectos, de profundizar las fortalezas y eliminar a lo máximo las debilidades, así como combatir las amenazas y aprovechar las oportunidades.

Hoy el Rector nicolaita sabe que cuenta con la solidaridad de los sindicatos universitarios y las organizaciones estudiantiles para enfrentar la crisis financiera que se presentará en el mes de septiembre, es por ello que el rector conjuntamente con la comunidad nicolaita tendrán que salir a conseguir los recursos financieros necesarios para solventar la emergencia.

Entonces las tareas para las semanas próximas que tendrá que encabezar el Rector Serna González tienen varias vías, por una parte evitar el colapso financiero que le impone el recorte al presupuesto por parte de los legisladores locales y federales y por la otra iniciar los trabajos de la reforma universitaria integral; al mismo tiempo la elección de la renovación del Consejo Universitario se lleve a cabo sin la intervención del poder gubernamental, los partidos políticos y las fuerzas reaccionarias que pretenden violar la autonomía universitaria.

  

e-max.it: your social media marketing partner